Monterrey se gana a base de dinero
Luis Donaldo Colosio Riojas no es un buen candidato, ni siquiera es candidato. Podría serlo, no lo desea. Las plumas compradas en su contra son eso, envilecidas, baratas, les llegan al precio por cualquier peso. Y, sin embargo, Luis Donaldo no quiere ser alcalde de la regia Monterrey, candidato de espuma.
Enfrente tiene a un depredador nato, Francisco Cienfuegos, su ruta priista de “quitacamino” tiene nombres: Jorge Mendoza, Felipe Enríquez, Héctor Gutiérrez. ¿Cuántos priistas en el Congreso de Nuevo León existían? ¿Cuántas curules compró Cienfuegos? A esa estridente posibilidad se enfrenta Colosio… y Víctor Fuentes.
Monterrey se gana a base de dinero. La imagen de Luis Donaldo dará, pero la casilla es otra cosa. Lo sabe Víctor Fuentes, a través de la pérdida de Felipe de Jesús Cantú. El fraude de Adrián de la Garza lo corrobora. Imposibilitado en estructura, Colosio será un visitante de la próxima elección. Ver, no aparecer.
Toda evidencia destaca. Si hoy fueran las elecciones, ganaría Luis Donaldo. Paco Cienfuegos y Adrián de la Garza le dieron 4 o 5 puntos de ventaja cuando impugnaron su residencia. Hoy no elegimos ni en Monterrey ni en Nuevo León. Los meses pasan, pesan.
La contienda será entre Víctor Fuentes y Paco Cienfuegos. Como no apunta, Luis Donaldo será un apunte. Sus cinco puntos de fama se diluirán. Tiene imagen, no estructura. Tampoco Cienfuegos tiene que confiar. La estructura de Felipe Enríquez y Héctor de la Garza trabajará en su contra. A favor de Víctor Fuentes y Clara Luz, obvio.
Si Paco considera un “contendiente” menor a los “Felipes”, se equivoca. En el escenario equívoco de las próximas elecciones, Luis Donaldo pierde, lo demás lo dejo a mi imaginación. No hay que padecer la democracia, hay que vivirla, beberla.