Martín Urieta, el legendario compositor de canciones como ‘Mujeres divinas’ y ‘Qué de raro tiene’, quedará al frente de la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM), tras la muerte de su presidente en funciones, el maestro Armando Manzanero, ocurrida el lunes 28 de diciembre, tras dar positivo a Covid-19.

En un comunicado difundido a través de sus cuenta en redes sociales, la SACM informó que Urieta asumirá el cargo a partir de este martes 29 de diciembre.

“A raíz de la irreparable pérdida de nuestro presidente, el maestro Armando Manzanero Canché, y en cumplimiento a lo previsto en los estatutos sociales de la SACM, a partir de esta fecha, 29 de diciembre de 2020, la Presidencia del Consejo Directivo estará a cargo del vicepresidente ejecutivo, el maestro Martín Urieta Solano”

Sociedad de Autores y Compositores de México

Martín Urieta será presidente de la SACM hasta junio de 2021

El documento, firmado por el licenciado Roberto Cantoral Zucci, director general de la SACM, precisa que Martín Urieta permanecerá en el cargo hasta que la Asamblea General de Socios elija al nuevo presidente, lo que podría ocurrir en junio de 2021.

“Vamos a darle tiempo al tiempo, la Sociedad de Autores es un gremio muy unido, muy sensible y sabremos esperar a que llegue el momento en que tengamos que tomar las decisiones y en el momento que lo hagamos, muy pronto lo comunicaremos”

Roberto Cantoral Zucci, director general de la SACM

Antes de asumir la presidencia de la SACM, Martín Urieta se desempeñaba como Vicepresidente Ejecutivo de la asociación, que tiene en sus puestos directivos a grandes amigos de Armando Manzanero, por lo que según el compositor, cualquiera que resulte electo en la próxima asamblea dará continuidad a los proyectos del músico yucateco.

¿Qué asuntos dejó pendientes Armando Manzanero como presidente de la SACM?

En entrevista con ‘Ventaneando’, Roberto Cantoral Zucci comentó que fueron dos los asuntos que Armando Manzanero dejó sin concluir como presidente de la SACM tras su muerte.

El primero, dijo Cantoral Zucci, era lograr “la remuneración compensatoria por copia privada de todos los aparatos tecnológicos que tienen aplicaciones para bajar contenido protegido por el derecho de autor, que compensaran a los autores por el daño que les causa la reproducción de todas las obras de los autores sin recibir ninguna remuneración a cambio”.

El segundo asunto era lograr que el bolero fuera reconocido como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.