Diputados de Morena proponen cambiar el nombre oficial a Valle de Chalco Solidaridad para borrar el “pasado salinista” del municipio mexiquense.
Para ello, Morena presentó una iniciativa de reforma del artículo 6 de la Ley Orgánica Municipal del Estado de México en el Congreso mexiquense para cambiar el nombre del municipio de Valle de Chalco Solidaridad a “Valle de Xico”; esto a fin de deshacerse del nombre del programa social impulsado por el expresidente Carlos Salinas de Gortari.
Por si fuera poco, el actual alcalde morenista de Valle de Chalco, Armando García Méndez, presentó 70 mil firmas de vecinos para solicitar a los diputados locales aprobar el cambio de nombre.
La propuesta ya fue votada y aprobada por integrantes de la Comisión de Legislación y Administración Municipal con seis votos a favor (de Morena y sus aliados del Partido Verde) y cinco en contra (del PRI y PAN).
¿Por qué Valle de Chalco Solidaridad se llama así?
El municipio Valle de Chalco Solidaridad fue fundado el 9 de noviembre de 1994, durante el gobierno federal de Carlos Salinas de Gortari y estatal de Emilio Chuayffet Chemor.
Fue dicho exgobernador quien envió una iniciativa de decreto al congreso mexiquense para crear el municipio número 122 con el “apellido” del principal programa social del exmandatario Salinas de Gortari.
Su nombre se debe a que está ubicado en el valle que fuera el lecho del antiguo Lago de Chalco y porque fue en ese lugar donde arrancó el programa federal “Solidaridad”.
Mientras que el nombre propuesto por Morena es “Valle de Xico”, debido a que al sur oriente se encuentra el “cerro de Xico”, que es un volcán extinto.
Tras su aprobación en comisiones, la iniciativa será sometida a discusión y votación en el Pleno del Congreso del Estado de México.
Esta no es la primera vez que se busca cambiar el nombre al municipio, pues en 2010 ya había realizado una consulta ciudadana en la que más de 30 mil habitantes opinaron que se debería cambiar el nombre oficial por el de “Valle de Xico”, y cerca de cinco mil personas expresaron su indiferencia.
No obstante, la iniciativa quedó congelada en el Congreso. ¿Esta vez será la buena?