Estados Unidos posee un plan para evitar que China se acerque a América Latina y siga contribuyendo en el desarrollo de sus países y la propuesta tiene que ver con el T-MEC.
Congresistas de la nación norteamericana ya no quieren que China tenga influencia sobre las regiones de Latinoamérica y el Caribe y se lo hacen saber al mundo con una singular iniciativa.
La cual, tomando en cuenta el acuerdo T-MEC con México y Canadá, pretende sacar a China de la ecuación y hacer que en este lado del planeta las relaciones sean más sólidas; te contamos de qué va.
Este es el plan de Estados Unidos para evitar que China se acerque a América Latina
Con un emblemático plan basado en la adhesión de países de Latinoamérica al T-MEC, Estados Unidos propone evitar el acercamiento de China, disminuir su influencia y poner un alto a su migración.
Y este consiste en una ley que promueva la inversión y la creación de cadenas comerciales entre la nación norteamericana y Latinoamérica, pues se considera que Estados Unidos suele ser ajeno a estas entidades.
Es decir, con el plan de los congresistas, se estima que Latinoamérica pueda unirse al T-MEC para entonces impulsar la relocalización de firmas y empresas, así como el nearshoring en su territorio.
Pues, dadas las condiciones internacionales, los países vecinos de Estados Unidos se han visto orillados a hacer negocios y reforzar el poder económico y comercial de China en el continente.
“Beneficiaría tanto a Centroamérica como a Sudámerica” señaló la funcionaria María Elvira Salazar, quien confía en que el plan podrá reubicar empleos y ganancias de diferentes tipos de China hacia Latinoamérica.
¿Por qué Estados Unidos no quiere que china se acerque a América Latina? Esto responden los congresistas
De acuerdo con Estados Unidos, el plan para evitar que China se acerque a Latinoamérica fue construido en un contexto en el que este país está desplazando a las marcas americanas y europeas.
Sobre todo en espacios como México en donde se alteran los intereses de la cadena de suministro, particularmente del T-MEC, porque China tiene ideologías sumamente distintas a este lado del hemisferio.
De igual modo, señala Estados Unidos, el propio T-MEC ha demostrado que la relación entre gobiernos de América del Norte tiene extraordinario potencial para el desarrollo económico.
Así pues, el dejar a un lado a China y el unir a Latinoamérica al convenio, podría generar incluso mayor fuerza ante posibles conflictos internacionales.
En estos últimos tres años hemos visto uno de los crecimientos económicos más importantes de la última década, incluso entre México, Estados Unidos y Canadá se genera más del 20 por ciento del PIB mundial.
María Elvira Salazar