Cada vez, los coches eléctricos son cada vez más populares, pero también tienen algunas desventajas. Una de ellas es que los motores eléctricos producen interferencias electromagnéticas en las frecuencias de radio AM, lo que puede distorsionar las señales y dificultar su recepción.
Según una investigación del Automotive Research Center, reducir esta interferencia de la Amplitud Modulada electromagnética generada por los autos eléctricos es un desafío y podría generar costos adicionales para los fabricantes de vehículos.
Esto se debe en gran medida a que, si bien es posible reducir las interferencias, no es posible eliminarlas por completo.
Los fabricantes de automóviles pueden proteger los cables y agregar filtros de interferencia y cancelación activa de ruido, así como reposicionar algunos componentes. Sin embargo, todo esto cuesta dinero.
El costo de la interferencia en la radio de los coches eléctricos
Un fabricante de automóviles estimó que el blindaje agregaría entre 35 y 50 dólares al costo de producción de un automóvil, mientras que la filtración agregaría otros 15 a 20 dólares.
En total, el Automotive Research Center estima que los costos de reducción de la interferencia electromagnética de los coches eléctricos podrían ascender a 3,800 millones de dólares para 2030.
Un gran dilema
La decisión de si reducir la interferencia electromagnética de los coches eléctricos es una buena idea es compleja. Por un lado, es comprensible que los fabricantes de automóviles prefieran no gastar dinero extra y aumentar el peso de sus coches. La radio AM también es completamente innecesaria el 99% de las veces.
Sin embargo, por otro lado, los fabricantes de automóviles que obtienen decenas de miles de millones de dólares en ganancias cada año ciertamente pueden darse el lujo de incluir una radio AM en sus autos eléctricos para que sus clientes tengan esta opción-