La cultura del ahorro es un tema vital para tener buenas finanzas, pero ¿Sabes qué pasa con tu cuenta de ahorro en el banco cuando mueres? En caso de que no lo sepas, la Condusef tiene la respuesta a tus dudas.

Muchas personas piensan que los bancos tienen la capacidad de quedarse con las cuentas de ahorro cuando sus clientes mueren, pero esta creencia no es del todo cierta.

La verdad es que, cuando mueres, tus familiares tienen el derecho de reclamar tu cuenta en el banco. Por si aún tienes más dudas, aquí te explicamos a detalle la respuesta de la Condusef.

Derecho al Luto

¿El banco se queda con tu cuenta de ahorro cuando mueres? Sí, pero hay condiciones para ello

La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) señala que un banco sí puede quedarse con tu cuenta de ahorro cuando mueres, pero después de años sin movimiento.

En términos generales, los bancos podrán quedarse con ese dinero únicamente si una cuenta no tiene movimiento en seis años o nadie reclama los fondos, sólo entonces ese dinero pasa a la beneficencia pública.

Sin embargo, esto podrá evitarse si la familia de la persona fallecida reclama esa cuenta de ahorro, pues en ese caso la cuenta se congelará hasta que el asunto se resuelva de manera legal.

¿Cómo puede mi familia cobrar mi cuenta de ahorro si muero?

Lo primero y más importante para que tu familia pueda cobrar tu cuenta de ahorros si mueres, es que estén registrados como beneficiarios de tu cuenta, algo que será confirmado por la Condusef.

Una vez que se verificó la información, el familiar (u otro parentesco) deberá presentarse al banco donde se guardó la cuenta de ahorros para presentar lo siguiente:

  • Identificación oficial
  • Acta de defunción del titular
  • Documento de la institución financiera donde conste la designación como beneficiario (algo que podrá resolverte la Condusef)
  • Formato o solicitud del banco para el trámite de retiro

Toma en cuenta que, si no hay ningún beneficiario legal, se necesitará realizar un proceso legal ante un juez para iniciar un juicio sucesorio de esa cuenta de ahorro.

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