De acuerdo con la investigación del doctor Carlos Sánchez Silva -investigador del Instituto de Investigaciones en Humanidades, Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca- publicada en su obra “Gastos y Apuntes de Cocina de la Casa del Señor Presidente de la República Don Benito Juárez. 1860-1870-1872″, don Benito gustaba de comer y beber bien.
Juárez era muy preciso en el tema de los gastos del gobierno, incluidos sus alimentos. En su última comida, felizmente está documentado un maridaje con selección de vinos hechos por Juárez. En el Archivo General de la Nación podemos ver cuál fue su elección
- Sopa de tallarines y huevos fritos
- Arroz salsa picante de chile chiltepín
- Bistec y frijoles
- Fruta
Para acompañar tan mestizo menú, el maridaje se complementó con las siguientes bebidas:
- Media copa de jerez
- Vino Burdeos
- Pulque
Comenzar un banquete con jerez, es una experiencia memorable. En el caso del “goloso del Guelatao” – llamado así por el doctor Sánchez Silva-, el jerez que bebió fue un Amontillado, uno de los vinos más complejos elaborados en la denominación andaluza de Vinos de Jerez con la uva blanca Palomino Fino.
En relación con el vino de Burdeos, se refiere al notable Chateau Lafite -vino tinto de la denominación bordalesa Pauillac principalmente con uva Cabernet Sauvignon y un poco de Merlot-. Aplaudo que el presidente Juárez haya puesto en su mesa uno de los mejores vinos del mundo con nuestro castizo teométl -pulque-, la bebida sagrada mesoamericana. Les prometo amigos lectores de SDP, que compartiré en una experiencia gastronómica reproduciendo este menú próximamente.
El doctor Sánchez Silva cuenta en su obra: “Juárez hizo derroche de su identidad mestiza. Sin complejos.
Se despidió del mundo gozando airosamente su identidad gastronómico-popular. Nos dejó para su estudio el detalle de platillos, bebidas y sus principios éticos, cristianos en el fondo... Fue barroco en la mesa, cosmopolita en la bebida y en la voluntad estoico. Creo que estos elementos aún salpican a nuestra cocina de pueblo.”
Para la cena, don Benito pidió una copa de rompope servida en copa chica. Un día después, el fundador de la República, el Benemérito de las Américas, falleció, un 18 de julio de 1872.
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