Ha trascendido que Donald Trump romperá el protocolo e invitará a gobernantes extranjeros a su toma de protesta. Ya recibieron la invitación formal Xi Jinping, de China; Javier Milei, de Argentina; Giorgia Meloni, de Italia y Nayib Bukele, de El Salvador.

Hace más de un mes se dijo en la prensa española que Trump había invitado a ese evento, informalmente durante su primera llamada telefónica, a la presidenta de México Claudia Sheinbaum. No se confirmó ni se desmintió tal versión.

Como yo no sabía que jamás se había invitado a gobernantes extranjeros a los actos inaugurales de los presidentes de Estados Unidos, escribí un artículo para sugerir a Claudia SÍ asistir si se le invitaba.

Prometí una encuesta para saber si la gente estaba de acuerdo, o no, en la participación de la presidenta de México en la toma de protesta de Trump, y hasta le armé una agenda a Claudia para su visita a Washington:

La agenda de Sheinbaum en la capital de Estados Unidos

Las columnas más leídas de hoy
  • Viajar el sábado 18 de enero de 2025 en cualquiera de dos vuelos: (i) Aeroméxico a las 8:40 de la mañana llagando a Washington-Dulles a las 14:00 y (ii) United, saliendo a las 9:40 y llegando al mismo aeropuerto a las 14:50.
  • Comida con el embajador mexicano ese sábado 18. Sede: la casa de la embajada de México.
  • Sábado 18 de enero de 2025. Después de comer, reunión con grupos de personas mexicanas residentes en Washington. Coordinador de la reunión: canciller Juan Ramón de la Fuente.
  • Sábado 18 por la noche. Aistencia a concierto en el Kennedy Center. Dos artistas mexicanos serán las estrellas: Jorge Federico Osorio, aclamado como “un intérprete imaginativo con una técnica poderosa” (New York Times), quien interpretará el Concierto para piano de Beethoven No. 3, y Carlos Miguel Prieto, quien dirigirá “las exuberantes y animadas Danzas Sinfónicas de Rachmaninoff”.
  • El domingo 19 de enero podría Claudia reunirse con más grupos de migrantes de origen mexicano e inclusive con personalidades de la extrema derecha que estarán en el gobierno de Trump.
  • El lunes 20 de enero de 2025 Claudia dedicaría al menos medio día a estar con Donald Trump en su toma de protesta.
  • Como el evento se realizará temprano, si la presidenta Sheinbaum quisiera podría regresar a México el mismo 20 de enero: United y Aeroméxico tienen vuelos directos a la capital de nuestro país a las 17:40 horas.
  • Si hubiera una agenda con Trump ese 20 de enero, la opción de Claudia para volver a México el día 21 sería hacerlo, temprano, en vuelos con escala, o esperar hasta las 5:40 de la tarde para un viaje directo.

La pregunta única en encuesta, que no se aplicó, acerca de si Claudia debe asistir a Washington, o no

La presidenta Sheinbaum será invitada a la toma de posesión de Donald Trump el 20 de enero de 2025. En su opinión, ¿debe Claudia Sheinbaum asistir a la toma de protesta de Donald Trump?

(a) SÍ

(b) NO

(c) NO SÉ

No insistí en el tema porque mucha gente experta en la política del vecino del norte me dijo que, por protocolo, jamás se ha invitado a gobernantes extranjeros a los actos inaugurales de los presidentes de Estados Unidos.

Pero Trump ha roto el protocolo. ¿Ya invitó a Claudia? Se supone que lo hizo hace más de un mes durante la primera llamada telefónica que sostuvieron. Si no ocurrió así, ¿invitará el presidente electo estadounidense a la presidenta mexicana? Ojalá no.

Es dable especular que Claudia Sheinbaum pensará: “Si Donald Trump no me invita, ya la hice”. Porque el impredecible gobernante estadounidense sería capaz de cualquier cosa durante su toma de protesta, hasta de ofender a México en su discurso, algo que ha hecho muchísimas veces durante ya demasiado tiempo.

Si Trump hiciera eso, la presidenta mexicana con dignidad protestaría retirándose del evento, lo que provocaría un problema a México. Esto es algo que Claudia evitará.

Si Trump la invita, o inclusive si ya la invitó como se dijo hace tiempo en la prensa española, la presidenta Sheinbaum deberá redactar un gran texto para disculparse con toda elegancia y recurriendo a las mejores formas diplomáticas. Y que sea el embajador Moctezuma quien aguante la probablemente insultante perorata del impresentable gringo.

La civilidad del Grupo de los 20 en Río de Janeiro Brasil casi seguramente no aparecerá en la toma de posesión del gamberro Trump quien, por lo demás, estará rodeado de su pandilla ultraconservadora.