¡Cuidado! Comer en menos de 20 minutos puede causarte graves problemas de salud.

Tener una alimentación saludable no solo consiste en seleccionar los ingredientes más nutritivos.

En realidad, también se relaciona con la velocidad en la que ingerimos los alimentos.

De hecho, cuando una persona tarda menos de 20 minutos en cualquier comida, lo está haciendo de manera rápida.

Causando con ello muchos efectos negativos para su salud.

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Esto deberías tardarte en comer, según los expertos

De acuerdo con los especialistas, se requieren alrededor de 20 minutos para comer, no menos. Algunos sugieren hasta 30.

Cuando llegamos a los 20 minutos, el estómago se comunica con el cerebro mediante señales hormonales, indicando así que uno está satisfecho.

Lo más recomendable a la hora de desayunar, comer o cenar, es eliminar cualquier distracción y centrarse en la ingesta de alimentos.

De esa manera se podrá disfrutar de mejor manera la comida.

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Otra sugerencia es elevar el número de bocados que se realizan cuando estamos en la mesa.

Al hacer eso, se hará más lenta una comida, permitiendo cumplir con el tiempo que se requiere en cada comida.

Ahora bien, también hay que tomar sorbos de agua entre bocados para evitar comer de manera acelerada.

Los beneficios de comer más lento es que ayudan a que tengamos saciedad.

Por ello, los expertos en salud dejan en claro que se deben incluir verduras y proteínas en cada comida, ya que requieren masticarse más.

Contrario a lo que pasa con los llamados alimentos ultraprocesados, que son muy fáciles de comer.

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¿Qué problemas de salud provoca comer rápido?

Como se mencionó, comer rápido puede generar diversos problemas de salud.

Eso se debe a que las personas que suelen comer muy rápido, explican los expertos, tragan más aire, lo que deriva en:

  • Hinchazón abdominal
  • Indigestión

Además de que la comida podría atascarse en su esófago y los nutrientes de cada alimento no se obtendrían de manera adecuada.

De igual manera, quienes comen rápido suelen tener problemas de obesidad.

Las personas que comen con más lentitud no son propensos a padecer sobrepeso.

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