“El hombre que no comprenda el sentido peculiar de su propia existencia singular se sentirá necesariamente paralizado en las situaciones difíciles de la vida.”

VIKTOR EMIL FRANKL

“Estrategia es aquello que realmente se quiere lograr.”

JORGE GONZÁLEZ MOORE

Se crea el FICOSEG, el Fideicomiso para la Competitividad con Seguridad del estado de Sonora; un mecanismo que canalizará recursos para fortalecer las instituciones de seguridad, procuración de justicia y fomentar la competitividad regional. Tal vez Sonora logre lo que el país necesita. Aún es pronto para dar un veredicto, pero lo que se deja ver es que sin duda allá se está trabajando en equipo.

Y es que la violencia que azota a no pocas zonas del país requiere del trabajo en conjunto. La responsabilidad está en los gobiernos, pero los empresarios pueden hacer su parte de manera voluntaria. Es lo que apuesta el empresariado de Sonora. Una propuesta que radica en la confianza en el gobierno y en el cuidado de las empresas, particularmente las más pequeñas.

Los empresarios que tengan 100 empleados o más serán quienes aporten recursos adicionales para la seguridad pública. Quienes no tengan tantos empleados participarán con iniciativas, actividades y acciones varias, pero no con dinero. La propuesta de origen netamente empresarial promueve un aumento voluntario del impuesto sobre la nómina del 3 al 4% (nuevamente, con excepción de las empresas menores a 100 empleados).

La seguridad es unas de las variables más importantes para que la inversión llegue y se quede en nuestro país. Y con esta iniciativa se busca contribuir a la construcción de un entorno más seguro y competitivo.

Desafortunadamente, si el impuesto a la nómina es alto, mayor es el “arancel” que cobra el crimen organizado en tiendas, restaurantes y demás lugares públicos.

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¿Es adecuado que no sean solo los gobiernos quienes atiendan el tema de la seguridad pública? No hay una respuesta definitiva; en estados fronterizos de la Unión Americana, por ejemplo, se atiende de manera conjunta. En todo caso, sin duda es y sería sano que continuara el análisis en este sentido y con la participación de la sociedad.

El punto es que en el modelo sonorense de seguridad son partícipes los mismos empresarios y de manera conjunta con las autoridades tomarán decisiones. En este fideicomiso participa un comité de 20 empresarios provenientes de distintos puntos de la entidad.

La apuesta es arriesgada, sí. Pero también necesaria.

En Sonora tienen claro que sin seguridad la economía no puede florecer y sin esa misma seguridad no habrá más empresarios que quieran llegar al norteño estado a invertir. Porque más allá de Trump, la infraestructura con la que cuenta Sonora y el ser frontera con Estados Unidos hace que sea uno de los estados más importantes para todos los fines de comercio, producción y paso de mercancías. Pero nada sirve si no se cuenta con seguridad pública.

Todos sabemos lo complicado —por no decir imposible— que resulta creer en los políticos. Y aquí viene lo interesante: ¿qué está haciendo bien Alfonso Durazo donde los empresarios sonorenses respaldan su estrategia de seguridad? ¿Qué están viendo los empresarios sonorenses que prefieren un incremento en el impuesto sobre la nómina para así combatir la inseguridad? La seguridad ciertamente se intersecta con la competitividad y la productividad. En la medida que la seguridad se incrementa, los otros dos aspectos también mejorarán. La apuesta del gobierno de Sonora y de sus empresarios es ver cómo se intersectan la seguridad con posibilidades de inversión y/o aliento a la inversión.

Pronto sabremos si el modelo es exitoso y, en ese caso, si es replicable y adaptable a otras zonas de México. Ojalá que sí.