Una maestra de yoga se hizo viral hace unos días después de que subió un video en el que se ve como es mordida por una iguana en la playa.
Enseguida, la maestra de yoga gritó del dolor y comenzó a hablarle a la iguana acusándola de haberle mordido el dedo, siendo criticada por tener temperamento explosivo.
Maestra de yoga es atacada por iguana durante clase virtual
El video muestra a la maestra de yoga filmando una de sus clases virtuales en la playa. Mientras esta ejecuta una posición de arco, llevando su mano en alto.
Enseguida una iguana se acerca a sus dedos y brinca para atacarle uno. El reptil se alejó al escuchar el grito de dolor de la maestra de yoga.
La maestra de yoga, quien se encontraba grabando en una playa, apuntó que esta es conocida por la cantidad de iguanas que tiene, y por que la gente va al lugar a alimentar.
De modo, que sería imposible controlarlas y no es que no se percatara de estas, sino que son normales en dicha playa.
“Todo el mundo me está preguntando si no las vi. Para ser claro, había iguanas por toda la playa. La gente va allí para alimentarlas”.
Maestra de yoga.
Por la zona de residencia de la maestra de yoga y lo que dijo después de ser mordida, esta se encontraba en las Islas Exumas, conocida como ‘La isla de las iguanas’, en las Bahamas.
Critican a la maestra de yoga por su temperamento explosivo
Después de que el video se volvió viral, la maestra de yoga fue fuertemente criticada por la manera en que le gritó a la iguana que la mordió.
En el video se puede ver que esta grita del dolor y enseguida le arroja un poco de arena, reclamándole por haberle mordido el dedo.
En otro ángulo, la maestra de yoga muestra como en realidad no estaba enojada, sino con mucho dolor y con ganas de reír por la tragedia que había vivido.
La maestra de yoga incluso se burla de lo sucedido y cambió su nombre de Twitter a ‘Da Iguana Gal’.
Finalmente, la maestra de yoga y meditación pidió no ser juzgada por un fragmento de un video, cuando se trata de una reacción normal.
“Me muerde una iguana y la gente ataca mis vibraciones y mi carácter, son estúpidos de verdad. No tengo malas vibraciones y no soy tóxica, la iguana solo tenía hambre… ¡Maldita sea!”.
Maestra de yoga.